jueves, 14 de octubre de 2010

Rumor has it...

Hace maso menos un mes empezé a ver Gossip Girl. Primero pensé que iba a ser una serie más de Warner Channel, pero después de ver la primer temporada casi entera en una noche, me di cuenta que la serie tenía algo más. Era algo que te atrapaba y que te dejaba con ganas de ver más y más a pesar de que cada capítulo dura como una hora, y la mayoría de las cosas se resuelven en el mismo capítulo. 
Terminé la primer temporada en dos días, y después de buscar la segunda temporada en algún post que no tuviera los links rotos, me vi toda la segunda temporada en otros dos días, y asi con la tercera y ahora la cuarta que cada semana me bajo el capítulo que va saliendo. 
Volviendo al punto...no es sólo la magia de sentirte un ricachón, de desear formar parte de esa clase social la que te da ganas de seguir viendo la serie. No es simplemente el hecho de que te identificás con uno o dos personajes. Esta serie particularmente tiene algo que no vi en muchas (y vi muchísimas series xD), y es que ningún personaje está libre de pecado, y con esto me refiero a que ningún personaje es del todo malo ni tampoco es del todo bueno. La verdad es que todos son...personas. Algunas más llenas de resentimiento, algunas más manipuladoras, pero en conclusión todos funcionan de la misma manera. Hacen lo que sea para lograr lo que quieren, aún signifique ir en contra de sus supuestos ideales (si es que existen los ideales en una serie tan plástica como ésta). 
Y no es que haya descubierto América, ni mucho menos, pero no sé si todo el que ve esta serie, la interpreta, o le ve lo mismo que le veo yo, o como la interpreto yo. Y si hay algo positivo que encontré en esta serie, es que me hace ver lo importante de las cosas, y que uno es como es y los demás o te aceptan como sos, o no te dan pelota, pero uno tiene que estar orgulloso de lo que es, y hacer las cosas con seguridad, sin importar lo que piensen los demás, o cuánto te juzguen.
Yo puntualmente soy una persona que se censura muchísimo para todo, que trato de vivir la vida con ciertos códigos y que la culpa es algo que trato siempre de evadir, dado que no soporto la sensación de culpabilidad. A que voy con esto? Que en esta serie, se demuestra, que las palabras son palabras, y las acciones son acciones, y que a pesar de que uno pueda mandarse cagadas, siempre, pero siempre se puede salir adelante y dejar el pasado atrás, aunque cueste demasiado a veces. Y que uno puede lastimar mucho a otra persona, pero si a fin de cuentas podés demostrar que te arrepentís, entonces va a estar todo bien. Y si no conseguís el perdón de la persona a quien lastimaste, de todos modos siempre va a haber otras con las que puedas corregir tu error pasado. Que los conventillos, las mentiras, las manipulaciones, son cosas ínfimas, y a fin de cuentas siempre lo que resalta en importancia es la familia y los deberes (estudio, trabajo, etc..). Y sí, claro que las relaciones sociales son importantes, pero las personas siempre están juzgandote, y a la primera de cambio que hacés algo que al otro no le parece, te condena, te etiqueta y es difícil que esa etiqueta cambie (al menos para la persona). Entonces mi conclusión, es que si te concentrás en lo que realmente importa, en las personas allegadas, en tu carrera, o en tu trabajo, el resto va a pasar de largo sin dejar ninguna cicatriz. 
Una pelotudez. Pero a quién le importa?

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